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Una sorpresa gratificante fue la posibilidad de acceder a la sección dedicada a la directora y guionista inglesa Muriel Box (1905- 1991). Su carrera se desarrolló tan solo durante dos décadas entre 1945 y 1964, en las cuales participó en alrededor de treinta películas con una fuerte impronta feminista. El forastero apasionado, película que dirigió en 1957, presenta un guión muy original en una sátira sobre la ficción y la realidad.
Un chófer italiano es contratado en una mansión para trasladar a un discapacitado casado con una novelista. La escritora en un momento de poca creatividad, se inspira en un comentario del nuevo empleado para escribir una novela que lo tiene como protagonista. Al llegar a sus manos el manuscrito, el conductor no tiene mejor idea que llevar la fantasía al mundo real, lo que provoca una serie de equívocos y situaciones jocosas.
Un acierto novedoso de Box es presentar la trama inicial en blanco y negro en tanto que la fábula en colores. La protagonista es una mujer independiente que hace mención a las sufragistas, mientras exhibe una posición de igualdad frente a su marido. Una comedia entretenida con diálogos chispeantes que el público premió con aplausos.
En 1957 también dirigió Lo que son las mujeres que contó con un elenco de excepción para la época: Lawrence Harvey, Mai Zetterling, Christopher Lee, Eva Gabor, Wilfrid Hyde-White y Diane Cilento. Un yerno desconcertado ante el comportamiento de su esposa, escucha los recuerdos amorosos de su suegro como consejos para entender mejor a las mujeres. La evocación traslada los hechos a principios de siglo XX donde suceden las desventuras románticas del joven diplomático a cargo de Lawrence Harvey.
Un viaje que lo llevará por un reino asiático donde quiere rescatar a una de las esposas del sultán, por París donde es desafiado a duelo por un marido despechado y por los aristocráticos salones londinenses. Las mujeres a las que se enfrentaba lo ponían en situaciones incómodas, ya que según él, las propuestas femeninas no eran las más apropiadas para quienes todavía usaban faldas hasta el piso.
O bien, de boca del sultán surgía la siguiente frase:”Yo uso a mis esposas tan solo como esclavas, en tanto que Uds. las usan como servidumbre, esposas y amas de casa” en clara defensa de Box de los derechos de la mujer. Un cine dirigido al público femenino que como bien dijo George Cukor al realizar Las mujeres (1939): “Sabemos que están en la oscuridad” debido a su gran presencia en las salas cinematográficas. Otra grata comedia de una directora poco conocida en nuestro país.
