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Imaginá que perdés tu celular. De repente no tenés cómo responder el Whatsapp a tu amigo, no podes chequear el inicio de Instagram a cada minuto, no te acordás cuando tenías turno al médico y te quedás con la intriga de si la persona que te gusta te respondió o te dejó en visto. #Incomunicados es la nueva serie cordobesa que llega para demostrarnos que no son las tecnologías las que nos complican, sino nosotros mismos. Raúl Vidal, creador y director de la serie, señala que “la tecnología comunicacional, según el argumento principal de la serie, pareciera ser que nos incomunica, en realidad es una excusa que uno se inventa, porque lo que uno siempre busca es complicarse la vida”.
Sobre cómo surgió la idea de crear esta ficción, Raúl nos comentó que nace de un proyecto de cortometrajes que se hizo en el año 2006 llamado Ringtone. “En aquel entonces todavía no estaban los smartphones ni las redes sociales, pero lo que sí existía eran los mensajes de texto y los ringtones. En ese momento, fui a una fiesta y vi a dos chicas que se estaban comunicando una al lado de la otra por mensaje de texto. En el único momento en el que se hablaron en persona fue porque una le preguntó a la otra si le había llegado el mensaje. Ahí me di cuenta de algo interesante estaba sucediendo con el tema de la comunicación, y de que la gente creía que se estaba comunicando más cuando, en realidad, es posible que se esté incomunicando”.
La serie, ganadora del Concurso de Ficciones Federales del INCAA, incursiona en todo tipo de fenómenos de la comunicación actual. “Hay un capítulo que se aboca a la forma de comunicar de los medios de comunicación. Otro capítulo muestra que la comunicación es el mero hecho de no animarse a decir lo que uno siente”, cuenta Vidal. Por otra parte, remarca como un segundo argumento el complicarse la vida, ya que los personajes se encuentran constantemente en enredos que son más simples de solucionar de lo que uno piensa. “La dicha, la felicidad viene de la mano de algo muy sencillo, de una línea muy recta que uno siempre tiene que complicar. Los problemas nunca cambiaron, la concepción del millennial no es diferente a la de mi generación, es la misma solo que está distribuida de otra forma”.
El elenco está conformado por figuras locales muy reconocidas como Max Delupi, El Loco Denis y los integrantes de Hecatombe!. En el transcurso del programa, aparecen veinticuatro personajes distintos y uno de ellos está inspirado en Raúl. Al consultarle si alguna vez se sintió incomunicado como uno de los protagonistas, señala: “Sí, de hecho Marisa, uno de los personajes secundarios, es una chica que pierde el celular porque se le cae adentro del inodoro. A lo largo de los episodios ella está aguardando por un celular nuevo y va teniendo una especie de ataque de abstinencia. Eso está inspirado en algo que me sucedió a mí poco antes de empezar la serie. Cuando estaba en otro rodaje me robaron el celular y pasé una semana sin teléfono. Esos días noté que la gente que estaba alrededor mío en el rodaje usaba mucho su celular y yo, que no lo tenía, lo necesitaba. Necesitaba entrar a Facebook o Whatsapp, por más que era posible que nadie me fuera a enviar nada. En ese momento me di cuenta de que era serio y a poco tiempo de arrancar el rodaje, hablando con el co-guionista Matías, decidimos introducir ese personaje”.
Una gran parte de la música de la ficción está compuesta por bandas locales. “La canción de la apertura es un tema de La madre del Borrego que se llama La Vida en las Veredas, y además hay capítulos que están musicalizados con temas de La Barra o de Touch”, comenta Raúl sin dejar de lado la idea de una próxima temporada. “Si hubiera una segunda temporada, quisiera meter muchísima más música local. Además, ya hay un montón de fenómenos nuevos que nos trajeron ideas para una segunda parte”.
La serie, compuesta por ocho capítulos de media hora, se emitió este año por Canal 10 y ya está disponible gratuitamente en CINE.AR. Sin lugar a dudas es una comedia para disfrutar en familia y con amigos, ya que te vas a sentir identificado con las situaciones absurdas que puede generar la comunicación actual.