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Hace poco, apenas unas semanas, durante el Festival de Cannes, mucha gente se preguntaba qué hacía Natalia Oreiro en la alfombra roja. No todos estábamos informados, y me incluyo, de las razones por las que la uruguaya había viajado a Francia, ni qué estaba promocionando. La razón tenía un nombre: Infancia Clandestina.
Infancia Clandestina es la elegida para representar a Argentina en los Oscar 2013. El film le ganó a otras películas argentinas como El Ultimo Elvis, Elefante Blanco y Dos Más Dos. Ahora la Academia de Artes Cinematográficas de Hollywood dirá si queda entre las cinco películas que competirán directamente por la estatuilla, y que se elegirán entre 59 películas de todo el mundo. Las nominaciones se conocerán el 10 de enero, y los premios se entregarán el 24 de febrero en Los Angeles.
Infancia Clandestina es la nueva película de Benjamín Ávila (Nietos), que participó en la sección Quincena de los Realizadores de Cannes donde compitió por la Cámara de Oro. El elenco del film lo completan César Troncoso, Ernesto Alterio, Teo Gutiérrez Romero, Violeta Palukas y Cristina Banegas, junto a la ya mencionada Natalia Oreiro.
El film cuenta una historia situada en el año 1979 en la Argentina, época de la dictadura militar, y narra sobre un fuerte secreto familiar. Es la historia de Juan (Teo Gutiérrez Romero), un niño de 12 años que regresa del exilio a Buenos Aires desde Cuba con sus padres. Ellos vuelven con identidades falsas para insertarse en la sociedad por lo que Juan en el colegio se llama Ernesto y por ninguna razón pude revelar su verdad.
Su padre, Daniel (César Troncoso), su madre Charo (Natalia Oreiro) y su tío Beto (Ernesto Alterio) también tendrán identidades falsas y tratarán, en lo posible, de llevar una vida normal en la clandestinidad. Todos viven con miedo porque tienen un vínculo muy fuerte con la militancia, porque conviven con armas, y porque saben que pueden ser encontrados y reprimidos en cualquier momento. En medio de esa clandestinidad, Ernesto vivirá una historia de amor con una compañera de escuela, María, que lo ayudará a compensar la fuerte tensión que reina en su casa con las reuniones de militantes y las armas escondidas.
El tinte especial que tiene esta película es que Ávila la basó en hechos de su vida. Se inspiró en su historia y la de sus padres, revolucionarios que luchaban en el movimiento guerrillero Montoneros en la década de los 70. Cuando tenía cuatro años, Ávila emprendió el camino al exilio con su mamá Charo, militante de Montoneros, y la pareja de ella, que era una de las cabezas de la organización.
Tras el golpe de 1976, la familia viajó a Cuba, donde nació el hermano menor de Ávila pero a principios de 1979, regresaron a la Argentina como parte de la primera contraofensiva montonera. Charo desapareció el 13 de octubre de 1979 y el hermano de Benjamín fue criado por otra familia y recuperó su identidad a fines de 1984, como uno de los primeros nietos restituidos por Abuelas de Plaza de Mayo.
El director, refiriéndose al film, dijo: «Tras hacer ‘Nietos’ decidí contar mi historia personal, pero mi película no es estrictamente autobiográfica, yo era mucho más chico, tenía siete años. Con mi co-guionista, Marcelo Muller, dejamos que la historia hablara por sí sola».
Por su parte, Natalia Oreiro habló del proyecto y dijo que formar parte de él “fue una experiencia muy movilizadora…es la historia de una familia que vivía con muchísimo miedo, pero al mismo tiempo seguía necesitando de la alegría, de la fiesta y del amor, porque en definitiva lo que estaban haciendo era para más de eso, un futuro mejor para Juan, que es el protagonista, el que cuenta la historia”.
La película tiene fecha de estreno para el 4 de octubre de este año. Si las fechas se mantienen y no sucede nada raro, la tendremos en cartelera pronto. Mientras tanto, podemos ver las primeras imágenes que salieron en el tráiler.
