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Como si se tratase de un hecho profético, todo aquello de lo que hablaba Radiohead en OK Computer (la monotonía, la desconexión del hombre con el entorno, etc.) fue posteriormente experimentado en carne propia por Thom Yorke, Phil Selway, Ed O’Brien y Colin y Jonny Greenwood. Así como en “No Surprises” se hace mención a esos apretones de manos y se pide por una vida carente de sobresaltos, la explosión mediática del disco consagratorio de la banda terminó de concretar todo aquello que generaba la fobia de Yorke y compañía.
De este modo la banda que hasta el 2007 había pasado de ser artífice de un one hit wonder cobainesco (“Creep”) hasta la gran promesa del rock con su segundo álbum, The Bends, pasaba a convertirse en el quinteto que salvaría el universo musical. Todos, entonces, querían hurgar en la mente de Yorke, hacerle explicitar el contenido de sus letras y solicitar su presencia para cuanto evento surgiera. El cineasta Grant Gee estuvo en el período más apropiado para mostrar a la banda de Oxford, durante esa gira promocional de OK Computer, donde la necesidad de aislarse del mundo (escuchar “In Limbo”) era más imperante que nunca.
Meeting People is Easy arranca con el enorme postulado de “Fitter Happier” y sus consignas difíciles de aplicar en la vorágine cotidiana: la productividad, la comodidad, la paciencia, la tranquilidad. En síntesis: el control. Todo el documental está atravesado por sonidos que irrumpen generando una molestia buscada, la forma con la que Gee refleja esa incomodidad de la banda en un año donde estaban en el ojo de la tormenta (“tengo el olor del hombre local que tiene el más solitario de los sentimientos” escribió Yorke en “Climbing up the Walls”).
Cansancio, hastío, frases inconclusas, escenas breves y, sobre todo, énfasis en los detalles, como el roce de manos entre Thom y Jonny antes de salir a tocar, uno de los momentos más emotivos de un documental que parece, a simple vista, excesivamente frio y calculado. Gee se mete en las obsesiones del cantante casi a modo de homenaje. Por eso, no hay escenas irrelevantes. Los planos de grandes ciudades y el caminar frenético de sus habitantes, los medios de transporte y su ir y venir incesante canalizan los planteos de “Airbag”, “Let Down” y viejos lados b como “Stupid Car” y “Killer Cars”.
Así nos ponemos en la piel de un frontman que se aburre de estar en el centro y deja que los demás hablen por él, como el momento en el que deja “Creep” a merced del público, mientras sostiene aburrido el micrófono, algo que recuerda a las primeras líneas de “Paranoid Android” (“¿Por favor podrías parar de el ruido? Estoy tratando de descansar”). A su vez, en medio de todo ese remolino, en “A Reminder” Yorke pide que le recordemos “cuando era libre, cuando era cool, cuando era yo”. Así, Meeting People is Easy muestra a una banda que, entre tanto fridge buzz, teme perder su identidad.
En “The Tourist”, la única canción de la banda escrita por Greenwood, también hay un pedido: “Hey man, aminora la marcha, aminora la marcha; idiota, aminora la marcha”. Ya era momento de parar o Yorke terminaría ahogándose paulatinamente como comienza a suceder en el video de “No Surprises”, también dirigido por Gee y cuyo rodaje es otra perlita de Meeting People is Easy. En relación a lo que se dice en “Follow Me Around” (“En estos días siento pánico, dejo de existir”), Radiohead hace las valijas, se muda a una casona, se despide de OK Computer y graba ese díptico que quiebra los preconceptos: Kid A/Amnesiac.
Romper los esquemas es algo que la banda siempre supo hacer, desde OK Computer donde la sociedad era eje temático hasta el séptimo y penúltimo álbum, In Rainbows, donde el universo es más íntimo, acotado y que muestra a Yorke reconciliado con la atención masiva. ¿Atrás quedaron viejas fobias? No parece importar, siempre y cuando uno pueda repetirse ese mantra que Michael Stipe le regaló a Thom para la letra de “How to Disappear Completely”: “No estoy aquí, esto no está sucediendo”. Si quieren conocer la esencia de Radiohead, vayan a este documental. En él está todo. Todo en el lugar adecuado.
*Publicado en el diario Sin Aliento del BAFICI el 19 de abril de 2012 y reproducido en el Tumblr de la autora.