Cine

Reírse de la pavada: Critica de Baywatch, Guardianes de la Bahía

Por Germán Pérez

Pese a un desafortunado guión, entre olas y  arena, un nuevo equipo de rescatistas se apoderan de las playas con humor y  buena química. Lejos de la esencia de la serie de Hoff y Pamela Anderson, el Baywatch ’17 divierte, aunque con un gran costo. Protagonizada por Dwayne «The Rock» Johnson, Zac EfronAlexandra Daddario, la película sorprende por la excelente química en pantalla de este nuevo equipo. El film se ilumina en las escenas compartidas por Johnson y Efron: estas ofrecen -en situaciones obvias- una buena dosis de humor absurdo, además evidencia buena camaradería entre actores. El carisma de Johnson reina en cada escena. La sorpresa de la película es la presencia de la hermosa Kelly Rohrbach, que opaca -y de gran manera- a «ojitos» Daddario.

Baywatch puede cumplir con gran facilidad con algunos chascarrillos pero, si hablamos en términos de «adaptación», deja mucho que desear. La serie ícono de los 90’s -tesoro nacional de esa época- resultaba ideal ya que tenía el espíritu, ambiente y si…, los bikinis que marcaban tendencia en esos años. La nave noventera comandada por Pamela Anderson, Traci Bingham y Yasmine Bleeth exclamaba sensualidad a lo largo y ancho de esos 60 minutos de duración por capítulo -actuaciones a un lado, por supuesto- Baywatch era eso, lo sexy se veía pero no explícitamente. Pamela Anderson podía correr por la playa, bajar escaleras, vigilar en su puesto de guardavidas o simplemente hacer absolutamente nada y en todo esto, lo sexy estaba ahí. En esta adaptación, las bromas explicitas se utilizan como conductor para demostrar sensualidad y gracias a un penoso guión de la autoría de Damian Shannon y Mark Swift, lo sexy está hecho para la mentalidad millenial y simplemente no funciona. La serie no invocaba palabras, lo mostraba sin peros y excitaba sin decir absolutamente nada.

Todos pueden recordar el ruido de la batería y el pianito de la canción intro de la serie, pero en esta nueva versión tenemos melodías actuales que por alguna razón consiguen elevar positivamente el ritmo de la película. De todas formas la cancioncita de Jimi Jamison está y viene con cameo incluído.

Estamos ante una película que nunca pidió ser una obra maestra y sí, lo tenemos que sufrir en pantalla, por ejemplo: el uso de exteriores en gran parte es la fiel y confiable pantalla verde, los efectos especiales son de un grado bajísimo (en una escena tenemos al Mitch de Johnson salteando obstáculos de fuego inexistentes) y, para finalizar, la película entera se siente como si fuera Baywatch: Hawaiian Wedding vol.2, una producción terrible que no tiene salvación ni con los chistes de series/bandas teen que Johnson hace uso cada 5 minutos de la película.

Baywatch ’17 sirve como referencias en las pobres adaptaciones de tv a la pantalla grande, de milagro gracias a la buena química del elenco y un humor crudo la película se puede disfrutar para reírse un rato de la pavada. Ofrece lo que promete, risas fáciles, mínima historia entretenida, un villano que funciona y el gran clásico de baywatch: bikinis.

Germán Pérez

Lector, escritor y cinéfilo. Pasa sus días en el gimnasio y viendo viejos y nuevos clásicos del cine. Fanático de Michael Mann.