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*Por Mariano González
El 16 de octubre comenzó la tan esperada tercer temporada de la exitosa serie de zombies de AMC “The Walking Dead” en Estados Unidos.
El final de la temporada anterior dejó varios cabos sueltos:
¿Qué encontrarán en la prisión que se vio al final del último capítulo?
¿Hasta qué punto están todos infectados?
¿Cómo se desarrolla o mantiene el virus entre los que aún están vivos?
¿Se quebrará el liderazgo de Rick? De ser así ¿Quién tomara la posta en el grupo?
¿Qué relación se dará entre Andrea, Michonne y habitantes de Woodbury?
¿Qué pasó con el hermano de Darryl?¿Volverá para vengarse de Rick?
Para muchos de los lectores del cómic estos planteos no van a ser muy difícil de dilucidar, pero ante los cambios que se han dado en la adaptación a la serie creemos que muchos nos vamos a llevar un par de sorpresas.
El comienzo de temporada estará apuntado a dos grupos: por un lado los que lograr huir juntos de la granja y por el otro Andrea y Michonne que son encontradas por otro grupo de sobrevivientes de la ciudad de Woodbury, los cuales parecen estar más organizados. El grupo de Rick, por medio de Darryl logra dar con la cárcel que se ve al final de la segunda temporada, la cual es un muy buen refugio por donde se lo mire, tiene armas, medicamentos, provisiones y todo lo necesario para mantener a otras amenazas fuera de los limites, pero no olvidemos que estas se han hecho para entrar y no salir.
El interrogante más grande será si la cárcel se convertirá en un refugio permanente o solo otro lugar de paso hasta la próxima horda de zombies, como fue la granja, o si se deberán enfrentar contra los habitantes de Woodbury, que parecieran quererla para ellos como nos hace pensar el tráiler. El líder de Woodbury se entera del grupo de Rick por medio de Andrea y Michonne; pero ¿cómo es que llegan a dar con el paradero del mismo dentro de esta prisión? Y, ¿cuáles serán las demandas del líder para hacer que Rick plantee una defensa de vida o muerte? Podemos tomar miles de conjeturas, pero esperaremos que nuestros queridos amigos liderados por Rick “puedan salvarse “ o mantenerse vivos, ya que a fin de cuentas pareciera que nadie esta “a salvo”.
*@flasheante con colaboración de @dementinsane
Ajena a lo que sucede en el cómic luego de que salen de la granja de Hershell, asumo que leer lo siguiente seria sinónimo de leer el mismo guión de la serie, basándome en lo mucho que se ha parecido la novela gráfica y el programa hasta ahora. Tocar una pagina más allá seria debelar los misterios y la serie perdería el factor sorpresa, aunque la incertidumbre y suspenso que esta genera capitulo tras capitulo, pueden conseguir que el espectador termine leyendo toda la obra de Robert Kirkman.
Como lo dije la primera vez que hable sobre The Walking Dead, los atractivos de la serie no tienen nada que ver con los zombies mismos, sino con quienes han sobrevivido y luchan para sea así. La historia tiene como protagonistas a un grupo de humanos, que es la minoría, que evita convertirse en zombie, por más que su futuro ya haya sido escrito. Como consecuencia de evitar lo inevitable, el grupo de sobrevivientes se va despojando de toda norma y regla que alguna vez sirvió para darle forma a una sociedad civilizada. Su justificación es “la ley del más fuerte”. ¿Hasta dónde se está dispuesto a llegar para resguardar el poco espacio que queda para los humanos en el mundo luego del Apocalipsis?
“El mundo que conocemos ya no existe, pero mantener nuestra humanidad es una elección” Dale
¿Hasta dónde se está dispuesto a llegar para conseguir lo más mínimo que se remonte a la vida pasada? Para conseguir un hijo, una esposa y jugar a la casita, ya vimos lo que Shane (Jon Bernthal) estaba dispuesto a hacer, al igual que Rick (Andrew Lincoln), quien lucho hasta el ultimo momento para no perder los estribos y tener que matar a uno de los suyos, a un sobreviviente. Pero “la ley del más fuerte” puede llevarnos a hacer hasta lo más indeseable como matar a tu mejor amigo.
Ante un mundo que ya es insalvable, desde este lado de la pantalla nos entretiene no solo la acción y el suspenso, sino el juego de ponerse en el lugar del otro. Con mirada crítica juzgamos a los personajes y a sus acciones, creyendo que nosotros podríamos hacerlo mejor. La biopolítica y el instinto de supervivencia despierta en sus personajes las más impensables reacciones ante el miedo que provoca saber que ya estás muerto aún estando vivo, y acá es cuando The Walking Dead se convierte en una historia transgresora.
“No puedo profesar a entender el plan de Dios, pero cuando Cristo prometió la resurrección de los muertos, yo sólo pensaba que tenía algo un poco diferente en mente.” Heshell
Ningún personaje está exento de la muerte durante la historia, y el espectador jamás podría imaginarse tener que vivir sabiendo que el peor peligro no son los muertos que caminan, sino que convertirse en uno de ellos ya es algo inevitable, sin importar cuanto corran y se oculten. Así que algunas de las preguntas que podremos despejar a partir de esta tercera temporada de The Walking Dead son, ¿hasta cuándo estarán dispuestos a luchar para seguir siendo humanos y ganarse un lugar en un mundo que ya no les pertenece?; ¿qué tanto sacrificaran sabiendo el futuro que les espera?.