Seguramente, Tom DiCillo no dudó ni por un minuto cuando le ofrecieron escribir y dirigir un documental sobre The Doors. El resultado fue When You’re Strange: un viaje hacia el interior de uno de los grupos más grandes de la historia. Narrado por el múltifacético Johnny Depp, este documental se estrenó en el Festival de Sundance en el 2009 (un año después en los cines extranjeros) y, según el tecladista Ray Manzarek, viene a ser “la verdadera historia de los Doors”.
Básicamente, está construido a partir de material inédito rodado entre la formación del grupo en 1965 y la muerte de Morrison en 1971. La película es muy sencilla, con un relato cronológico y detallado que, entre sus puntos fuertes, se destaca la importancia de Robby Krieger en la composición de muchos de los mejores temas de la banda. La frase “los 60 comenzaron con un disparo” es lo primero que dice Depp en referencia al asesinato de John Kennedy, y luego va tejiendo a través de las imágenes la vida de The Doors con los hitos contraculturales de esa década. Pero lo que hace a When You’re Strange fundamental e imprescindible para cualquier amante de la banda.
Contiene imágenes inéditas o muy poco difundidas hasta ahora: fotos de su infancia y adolescencia, la filmación de un Morrison ya deteriorado por el alcohol y las drogas, los escándalos durante las giras, los juicios por exhibición indecente y uso de lenguaje ofensivo, etc. Por otro lado, muestra hermosos fragmentos de Jim disfrutando del mar, pasando un buen rato con amigos y ese tipo de cosas.
Hasta cierto punto, el documental sobre The Doors se convierte inevitablemente en un documental biográfico sobre Jim Morrison. Una personalidad tan fuerte y especial que atrajo todas las miradas. A pesar de ello, DiCillo pudo recoger el ambiente de la época y el impacto del desembarco de The Doors en ella. Es un documental vibrante, dinámico y riguroso, cualidades difíciles de combinar en este género, pero Tom DiCillo lo consigue.
When You’re Strange es un viaje que ayuda a comprender la existencia y desaparición del grupo. Es la crónica de un talento desbocado, de un carácter difícil de contener, de una personalidad distorsionada por las drogas. Morrison tenía un talento indiscutible para la poesía y la música, pero tal vez fue víctima de su propio genio, y también de una época agitada que encontró en las drogas un refugio ideal.
Y aunque parezca que sólo se habla de Morrison, DiCillo no se olvida de que la banda no sería nada sin Densmore en la batería, Krieger en la guitarra y Manzarek al teclado. Con menos de una década de carrera, The Doors revolucionó la música para siempre, y la temprana muerte de Morrison nos privó de su genialidad, pero les proporcionó la gloria inmediata, el mito instantáneo. Cualquiera que sea fanático de The Doors, no puede dejar de ver este documental. Pero quien, además, busque una crónica de la música y la cultura urbana del siglo XX, de la época dorada del rock, tampoco debe dejar de ver When You’re Strange.