Series

Netflix y sus series propias: la industria se revoluciona

Por Victoria Barberis

Netflix es una de las plataformas que más protagonismo ha ganado desde que en 1997 Reed
Hastings y Marc Randolph redefinieron por completo la manera de alquilar películas. Presentaron un modelo que hacía posible acceder a un videoclub virtual (servicio de VOD), donde los usuarios podían disponer de una cantidad ilimitada de películas y series, ya sea online o mediante envíos por correo postal dentro de los Estados Unidos.

Con los años, fue posible el lanzamiento del servicio de streaming a Canadá, Europa y más
recientemente a Latinoamérica, llegando así a más de 30 millones de suscriptores que por un abono mensual de ocho dólares tienen a su alcance una amplia carta de productos cinematográficos y televisivos en alta calidad. También existe una modalidad de prueba, gracias a la cual, aquellos usuarios indecisos pueden utilizar el servicio sin cargo por un mes antes de abonar la suscripción.

El plan de negocios de Netflix se ha ido adaptando a las necesidades de las audiencias de tal forma que logró desterrar a la famosa cadena Blockbuster (que también intentó dar pelea a la nueva realidad del consumo online ofreciendo un servicio similar). La sed de rapidez, calidad y facilidad de los nativos digitales abre el juego de manera interesante, ubicando esta propuesta por encima de otras ofertas para acceder a contenidos en Internet, aún en una era en la que se dice que la piratería está poniendo en peligro la continuidad de todos los sistemas que requieren el pago de una cuota.

En busca de la producción propia

Ahora, la empresa norteamericana busca ampliar aún más su terreno produciendo sus propios
contenidos. Orange is the new black será una de las series que se podrán ver por este medio, un drama escrito por Jenji Kohan donde se narra la vida de una mujer durante su paso por la cárcel.

Posiblemente la propuesta más fuerte sea House of Cards, un drama político protagonizado por
Kevin Spacey, que llega a la pantalla de la mano de nada menos que David Fincher. El estreno está previsto para el 1 de febrero de 2013 y tendrá lugar de una manera bastante particular, puesto que se subirán los trece episodios de la temporada de una sola vez.

Se trata de una apuesta arriesgada, no solo por los nombres que ostentan, sino también por la
inversión de más de 100 millones de dólares que ha realizado la empresa. Si estas ambiciosas
propuestas tuvieran buena aceptación en el público, esta plataforma de streaming podría estar
dando el primer paso para redefinir los paradigmas de la industria audiovisual, otorgándole más protagonismo a Internet para que ya no sea solo el medio por el cual se descargan contenidos, sino que pondría en el mapa otra forma de consumir y trabajar con este medio.

No es ninguna novedad que desde hace unos años la manera de disfrutar de los productos
audiovisuales está en constante cambio, lo que dio lugar al surgimiento de una amplia gama
de medios informáticos que posibilitan descargar o ver películas y series online, en cualquier
lugar del mundo y de manera rápida y gratuita, o al menos, a bajo costo y en alta calidad. Este
proceso nunca se detiene y actualmente está abriendo un nuevo mundo de posibilidades para los
escritores, los productores y los usuarios.

Victoria Barberis

Es periodista de profesión y escritora de corazón. Es "seriéfila" y una aficionada a las sagas. Su pluma a veces es sarcástica, pero siempre divertida.