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La razón de estar contigo 2 es un caso muy extraño dentro de la industria del cine. Se trata de una secuela, basada en un best seller llamada originalmente A dog’s journey escrita por W. Bruce Cameron, quien también es el guionista de ambas películas. Lo raro es que no suele haber segundas partes de este tipo de historias y si las hay, suelen referirse al pasado, como por ejemplo las del perro Beethoven que supo tener su propia saga. Pero esos casos también no manejaban los registros que sigue esta película. A saber.
La primera La razón… estaba dirigida por el director sueco Lasse Hallström, especialista en filmar películas llenas de golpes bajos, lacrimógenas y hasta podría decirse nefastas ideológicamente pero hay algo de lo que no se lo puede acusar: El tipo es honesto en sus intenciones. Y algo de eso tienen este sub-genero de perros que la van a pasar mal para volver (o no) con sus dueños. Porque la mayoría de estas películas son eso.
Puro golpe bajo, manipuladoras, sádicas y miles de adjetivos más pero a la vez son honestas. No niegan que buscan hacer llorar al espectador de la manera más ruin, tampoco que son aleccionadoras y que quieren imponer un mensaje cuando es innecesario. De todo eso son orgullosas y dentro del panorama del cine mainstream podría decirse que es valioso que se sigan haciéndose, a diferencia de otras que quieren ocultar lo que realmente son.
La historia de La razón de estar contigo 2 es la típica: el perro protagonista de la anterior sigue reencarnando para conocer más sobre su existencia mientras espera reencontrarse con su dueño. Para eso va a morir varias veces (lo cual va a hacer llorar al espectador) va a cambiar de cuerpo y de género en todo este viaje.
No se trata de una película que vaya a cambiar la vida de nadie. Es simple, su puesta en escena es profesional pero nada más. Las actuaciones son convincentes pero acordes a la propuesta, aunque si es raro ver a Dennis Quaid de nuevo, aunque esta vez más acotado su personaje, ya que se trata de un actor que se merece mejores oportunidades. En fin el perro no trae nada nuevo pero aun así no disgusta, no enfurece y hasta es amena.
Su directora Gail Mancuso, tiene una larga trayectoria dentro de la televisión y logra que La razón de estar contigo sea una continuación entretenida, que sigue la estela de la anterior y que entiende todo lo que hace funcionar a este tipo de películas. No va a cambiar el mundo y tampoco se lo propone pero por lo menos sirve para distraerse un par de horas. Valoración: Buena
