Cine

A 30 años, el impacto de Blade Runner

Por Juan Pablo Garaguso

Se cumplen 30 años de una de las grandes películas de la historia del cine. La película que por excelencia, es considerada como la precursora del subgénero de ciencia ficción, mejor conocida como Cyberpunk. Me refiero, ni más ni menos, a la importante película de culto, Blade Runner dirigida por Ridley Scott en 1982.

El guión lo empezó a escribir Hampton Fancher, que no fue del agrado de Ridley Scott, por lo tanto, David Peoples fue contratado para reescribir el libro cinematográfico de Fancher; quién más adelante escribió el guión de “Doce Monos” (Terry Gilliam, 1995).

El guión del film es una versión libre de la novela corta de ciencia ficción de Phillip K.Dick (1928-1982) “Do Androids Dream of Electric Sheep?” (trad. “¿Sueñan los androidescon ovejas eléctricas?”) publicada en 1968.

Blade Runner es ambientada en un futuro sombrío, corrompido social y políticamente en la ciudad de Los Angeles, EE.UU. durante el mes de noviembre del año 2019. Una ciudad que parece una rara mezcla entre Nueva York y Tokio. El personaje principal Rick Deckard (Harrison Ford), es un agente de policía semirretirado, que es llamado para cumplir con una misión especial, la de erradicar a cuatro Replicantes fugitivos en el planeta Tierra.

Ellos son genéticamente similares a los seres humanos, pero dotados con una mayor agilidad y fortaleza, carecen de empatía, en una palabra, son androides. Fueron diseñados por Tyrell Corporation para vivir unos pocos años. Ellos regresan a la tierra para encontrar una forma de extender su vida útil y conocer a su creador.

Deckard visita a Tyrell Corporation, fabricantes de los Replicantes, y conoce a Rachael (Sean Yong) quién más adelante se convierte en su amante. Ella es una empleada de Tyrell Corporation que no sabe que ella también es una Replicante hasta que Deckard se lo confiesa; por lo tanto termina Rachael convirtiéndose en una fugitiva más.

Deckard termina matando a todos los Replicantes menos a uno; Roy Batty (Rutger Hauser) quién para su desazón aprende de su creador; el Dr. Eldon Tyrell (Joe Turkel) que su vida no puede ser extendida y sólo durará 4 años. Irónicamente, su fecha de vencimiento se expira en medio combate contra Deckard. La película termina con Deckard aprendiendo que él también es un Replicante y se escapa junto a Rachael a un destino incierto.

Blade Runner construye un mundo ruin, sin esperanzas, dentro del imaginario tipo de la ciencia ficción. A diferencia de muchas películas de su género; no es la clase de film que intenta deslumbrar por sus efectos especiales, o mostrar alienígenas o humanoides; o nuevas tecnologías futuristas, que pueden ser del agrado de los fans de Star Wars o de Star Trek. Es un fiel retrato del género Cyberpunk, un mundo futurista dónde combina la ciencia avanzada como la cibernética y el deterioro casi anárquico del orden social. Un mundo oscuro; en el cuál es por poco deshumanizante y de tono pesimista.

Blade Runner influenció a muchos grandes del género como Matrix. Sin duda Metrópolis
(Fritz Lang, 1927) es el sello del cine expresionista alemán, sienta su influencia en el
Cyberpunk y especialmente en este film. Claro está que Blade Runner se distingue de muchos de los exponentes de su género; sin embargo; ¿Qué es lo que hace a este film un fiel ejemplo de ciencia ficción?

Antes que nada, su pregunta existencialista. La ciencia ficción es una fantasía, que intenta explicar lo no explicado. Esto, puede ser interpretado de varias maneras, pero no se puede negar que el film abre un sinfín de preguntas universales. Para empezar, ¿En qué ha devenido la vida humana? ¿En qué consiste? ¿Que la motiva? ¿Qué nos hace humanos? Y que sin lugar a duda, deja una suerte de respuesta, como la conexión, los vínculos entre las personas (si se puede usar el término en este caso); o para los más románticos, el amor.

La temática universal del film es lo que también lo extrapola a otros géneros fílmicos. En él encontramos huellas del film noir, y de un clásico thriller en cuanto a su estética y ritmo en el relato. El uso del monólogo interno permite al espectador ser testigo de este singular escenario, de una forma verdaderamente intima y personal.

Celebramos los 30 años en Negro&White de Blade Runner, no por sus deslumbrantes efectos, o su trama atrapante, como tampoco, por su inigualable contribución estética al género, sino por la simple razón de que su perspectiva sobre la experiencia humana no deja de estar vigente.

Juan Pablo Garaguso

Realizador audiovisual y docente de Historia del Cine. Crítico, meticuloso e incisivo. Tenaz y puntual, registra el cine comercial y el 8 mm que nadie se enteró que existía.