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Las fotografías son difíciles de digerir. No aptas para estómagos sensibles. Tampoco para espíritus conservadores. Esto es porque en el fondo, bajo la primera impresión que generan, reside la vocación artística que todo lo perdona. Lejos de estimular el morbo, es necesario entender que el arte es arte al fin. Sin adjetivos. Así lo entiende el multifacético actor (Requiem for a Dream) y cantante (30 Seconds To Mars) Jared Leto. Que no deja de sorprender.
Leto, luego de tres años ausente en la gran pantalla, se quitó la remera y posó frente a la cámara del cotizado fotógrafo estadounidense Terry Richardson, íntimo de otras celebridades como Lady Gaga y Lindsay Lohan. La galería de imágenes apareció en el sitio Justjared y generó muchos OOOH!! y UUUH!! porque no se trataba de un despreocupado artista captado por el ojo de Richardson en el backstage de su show o en episodios irrelevantes de su gira mundial. Esta vez lo que figuraba era un Leto extremadamente delgado cuya silueta recordaba a los esqueléticos zombies de The Walking Dead.
La drástica pérdida de peso responde a su adaptación al papel de su próxima película: The Dallas Buyer’s Club, en la que interpreta a Rayon, un portador de VIH. El nudo gira alrededor de la vida de Ron Woodroof (Matthew McConaughey), un electricista que es diagnosticado de SIDA en 1986 y que pone en marcha un plan para acceder a los fármacos contra la enfermedad, hasta entonces ilegales en Estados Unidos. El mismo McConaughey fue noticia cuando circularon imágenes de su torso desnudo después de una dieta con la que bajó 40 kilos.
El personaje de Leto es todavía más curioso. Para completar la personalidad encomendada, el actor agregó vestidos, zapatos altos, maquillaje y se depiló las cejas y el pecho con el fin de lograr una apariencia femenina. Porque Ron es, además, transexual. Tu cuerpo pasa por etapas extrañas. Para mí no se trata de bajar la mayor cantidad de peso, se trata de representar mejor el personaje, dijo a la revista Vulture. Y omitiendo los pormenores de su ayuno, confesó que hace un mes que sólo toma agua y consume lo fundamental para vivir.
Otros colegas de Leto se habían sometido en el pasado a radicales cambios para adaptar sus cuerpos a los personajes. Es el caso de Christian Bale para la película El maquinista, Tom Hanks para Náufrago y (la favorecida) Renee Zellweger para Chicago. Laird Cregar llegó a bajar 88 kilos para participar en la película Hangover Square a costa de un régimen de tal severidad que lo llevó a la muerte en 1944.
Pero Leto es la excepción de la excepción. Su nueva figura es una metáfora invertida de lo que personificó en el año 2007, cuando subió casi 30 kilos para interpretar a Mark David Chapman (el asesino de John Lennon) en la película Chapter 27.
El rodaje de The Dallas Buyer’s Club está en marcha en la ciudad de Nueva Orleans y anuncia estreno mundial en 2013. Promete buena trama y un elenco de actores decididos a arriesgar lo más íntimo por no faltar al guión. O por amor al arte. Sin adjetivos. Leto se acomoda la peluca, se cierra el vestido y sale al set de filmación.